Conforme la humanidad avanza, y se implantan más leyes de separación de residuos, compartimos nuestro día a día cada vez con más contenedores en las calles.
Aunque la clasificación parece simple y entendida por todos, cada día se producen equívocos y depositamos en el contenedor que no es el residuo que no se debe (a este residuo mal clasificado se le llama IMPROPIO), lo que hace que el proceso de reciclaje de ese contenedor se vea entorpecido y/o incluso se tenga que desechar su contenido entero como ocurre en algún residuo.
Para ello queremos aportaros esta simple guía ilustrada, para intentar afianzarnos conocimientos y resolver pequeñas dudas.
El contenedor AMARILLO está destinado a envases de plástico, latas y bricks. Se refiere a envases de plástico, no a residuos de plástico que es la creencia popular. En este contenedor no se depositan juguetes de plástico, ni otros artículos de plástico como pueden ser cubos de fregona o sillas de terraza.


El contenedor AZUL está destinado a papel y cartón. El papel plastificado no debe ir a este contenedor pues perjudica el reciclado del resto del contenedor.
El contenedor VERDE con antiguamente con forma de iglú, está destinado a envases de vidrio.

El contenedor MARRÓN está destinado a residuos orgánicos destinados a ser compostados.

El contenedor BLANCO pequeño y cuadrado, destinado a residuos de aceite de cocina. ( en algunas localidades lo he visto color NARANJA ).

El contenedor color VERDE destinado a residuos no orgánicos destinados a vertedero y no a ser compostados.

El contenedor ROJO está destinado a pilas.

El contenedor esta destinado a excrementos animales.

( Los colores y formas pueden depender de cada localidad. Pudiendo no existir todas las variantes en todas las localidades . )